Después de una dura semana de trabajo, entrega de prácticas de redes y bases de datos, disgustos en mi piso (algún día escribiré sobre eso) y malos rollos sentimentales (probablemente sobre esto también escribiré) vuelvo a mi abandonado weblog. En estas ocasiones es cuando me doy cuenta de la poca voluntad que tengo, me saturo un poco y lo dejo a la buena de dios.

Menos mal que tengo a kreach, que, no sé cómo se las apaña, que siempre se entera de todo el primeroemo lengua pero lo malo es que nunca me trae buenas noticias. Resulta que ahora parece que mi muy querido Wi-fi no es un protocolo tan seguro como parece.

Según he leído, con un ataque de denegación de servicio (DoS, que simplemente consiste en saturar a un servidor con peticiones falsas hasta que queda fuera de servicio) simplemente desde una PDA se podría dejar la red en mantillas (desde el protocolo, eh?)

Los expertos aclararon que la vulnerabilidad no permite interceptar o modificar los datos transferidos, pero si puede afectar seriamente el funcionamiento de de la red, dejando a los usuarios -clientes o empleados- sin acceso a valiosos recursos online.

Según la AusCert no existen actualizaciones o defensas que se puedan tomar contra este tipo de ataques ya que la falla subyace en la base de la implemantación del protocolo 802.11 DSSS (Direct-sequence spread spectrum) en los equipos. Con este antecedente, los expertos señalan que esta tecnología no debería ser usada en ningún caso para soportar infraestructura crítica.

Fuente: IBLNEWS via kreach

Comunicado oficial

Pero parece ser que no es tan grave como parece, y esto no será el fin del protocolo Wi-fi. Al menos eso dicen mis compañeros de foro, podéis verlo aquí. Yo, como es el primer año que estudio redes, no me pronuncio.