Sabéis que me gusta la música. Y si es gratis, mucho mejor, ¿no? Pues todo lo que había probado hasta ahora (AllofMP3, Pandora, Lastfm…) se queda en mantillas al lado de mi nueva aplicación favorita: Spotify.

spotify

Esta anotación es ya viejuna para mis coleguillas de la red, pero creo que mis lectores de la calle me lo agradecerán.

Para no ser prolija, y como muchos blogs ya han hablado largo y tendido sobre esto, lo explicaré sencillamente: es un reproductor de música bajo demanda. Es decir, tú buscas música y al momento la puedes escuchar. Sin esperar mucho, sin tener que descargar, sin ocupar espacio en tu ordenador, con una calidad aceptable (al menos para mí), pudiendo hacer listas de reproducción como en cualquier reproductor…

Es como una radio donde elijes las canciones.

¿Inconvenientes? pues los hay, como en todo lo que es gratis.

Para empezar, no está disponible para todo el mundo. Por ahora sólo se puede usar en España, Francia, Reino Unido, Suecia, Finlandia y Noruega.

Seguimos, funciona con invitaciones, es decir, no se puede registrar quien quiera libremente… eeeeeerror! el registro está abierto ahora por un periodo limitado. Después, con las invitaciones, no son difíciles de conseguir.

Tiene algo de publicidad. Esto me lo han dicho, a mi todavía no me ha salido así que no puedo opinar.

Y no voy a contar mucho más porque lo hacen muy bien en otros blogs: