A pesar de que el año pasado los Reyes Majos se portaron mal conmigo (ahora sí lo puedo decir, porque no me hicieron mucho caso), me gusta hacer listas, a ver qué pido este año.

Para ponérmelo más fácil y evitar frustraciones futuras, esta vez me centraré en las cosas materiales. Siempre lo había pensado, pero he comprobado que es cierto, lo material siempre se acaba consiguiendo.